Recuerdo que cuando era pequeña, mami hacía unas comidas fenomenales. Se desvivía en la cocina. Si llegaba visita, la perdíamos. Se iba a su “mundito” a crear los mejores platos. Platos sencillos y otros más complejos pero cada uno sabían a todo el amor que le echaba.
Acción de gracias y navidad no eran la excepción. Recuerdo que para estas fechas se unía con mis tías y juntas cocinaban. Hacían pasteles, postres como arroz con dulce, tembleque, budín, en fin, de todo lo que comemos en Puerto Rico para estas fechas. Mientras escribo esto me parece poder oler uno de sus bizcochos en el horno y verla sonreír en la cocina, como la persona que ama lo que hace.
De seguro tienes muchísimas memorias hermosas de cuando eras más joven. Estas memorias se graban en forma de olores, momentos, sentimientos y pueden ser positivos o negativos. A ver, piensa en una memoria agradable de cuando eras menor. ¿Cuáles son los sentimientos que trae esta memoria?
En estos pasados dos años y medio hemos vivido, perdido y ganando tanto en tan poco tiempo. Que, si una se sienta a analizar todo lo que hemos pasado, al menos yo, quiero sacar este tiempo para cómodas y establecer conexiones y lazos más fuertes con los nuestros. Quiero desarrollar nuevas memorias y experiencias, pero hacerlo a mi estilo. Tú también deberías hacer lo mismo.
Te comparto unas ideas para hacer de este tiempo uno especial para ti y los tuyos.
Menos es más
El otro día leí un artículo que decía que en estas fechas debemos mantener las cosas simples. Limitar el trabajo que pasamos, utilizando platos que sean versátiles, que podamos sacar del horno a la mesa.
Por lo general cuando celebramos las épocas festivas y comenzamos a recibir invitados y familiares en nuestros hogares queremos darles lo mejor. No sé si te pasa igual, pero a mí me da hasta ansiedad porque quiero hacerlo todo tan bien. Quiero que esa persona tenga una experiencia inolvidable como la que tenían las personas que nos visitaban cuando era pequeña.
Ciertamente lo que hace de estos momentos inolvidables no será la vajilla o lo fino que se pueda ver sino la experiencia. El calor que se siente con los nuestros y aún con aquellos que no conocemos. Con esto no te digo que no le prestes atención a esa parte, si no que no te estreses por ella. Trata de crear un ambiente sencillo y delicado que sea memorable para ti y para los tuyos.
Los detalles son importantes
Verdad que cuando recibimos un detalle de parte de alguien nos sentimos importantes. Así sea algo súper sencillo. Esto pasa porque se satisface la necesidad básica del individuo de sentirse aceptado y reconocido.
Una idea para lograr esto es, si conoces a cada persona que asistirá a tu hogar, puedes añadir un detalle personalizado en la mesa para cada uno. Recuerda que menos, es más. No nos vamos a ir over board por ahí a mandar a hacer servilletas personalizadas con los nombres de todos. La idea es añadir un pequeño detalle para cada persona que te visita. Esto puede ser desde un simple menú impreso con el nombre de la persona o una nota de tu parte, dando gracias por esa persona.
No te compliques la existencia
Algo que me encanta de mi suegra es que al igual que mami, veo como se disfruta cuando entretiene personas en su casa o cuando hace actividades (fiestas) en su casa. Con esto que voy a decir me voy a tirar a mondongo como decimos en Puerto Rico, pero a pesar de que le gusta entretener (hacer fiestas) la cocina no es su pasión. ¡Hace un pastelón riquísimo pero la cocina no la llena, más la llena todo el andamiaje de crear la fiesta, organizar la actividad y que esta fluya como debe ser!
Quizás tú estás en el mismo barco y eso está bien, no todas nacimos para la cocina. Si tienes la capacidad económica puedes hacer lo que hace mi suegra, contrata alguien que te haga la comida. No tienes la capacidad económica, busca ideas y recetas sencillas que puedas hacer, acércate a una amiga que vayas a invitar a tu casa y cocinen juntas.
Donde quiero llegar con esto es que, independientemente de que la cocina sea tu fuerte o no. No dejes que eso te limite de tener un tiempo agradable con los tuyos. No te compliques la existencia. Deja que este sea el año donde hagas el papel de anfitriona, el año donde seas tú quien crees memorias para los tuyos.